Fenoménica: La fenomenidad
Mundo,
Física, Tierra
O
la subversión de toda institución estética[1]
Como
la derrota, como la paz
La
primera vez que te vi
Y
mentí;
Así
te mentía.
Luego
cabalgamos juntos.
¿Autocrítica? No bueno, deje usted la ingenuidad hermenéutica de
su estado:
Se puede
considerar la historia de la especie humana en su conjunto como la ejecución de
un secreto plan de la Naturaleza, para la realización de una constitución
estatal interiormente perfecta, y, con ESTE FIN, también exteriormente, como el
único estado en que aquella puede desenvolver plenamente todas las
disposiciones de la humanidad […] Lo que importa ahora es si la experiencia nos
descubre algo de semejante curso del propósito de la Naturaleza. Digo que muy
poco; porque esta órbita parece exigir tan largo tiempo antes de cerrarse que,
basándonos en la pequeña parte recorrida hasta ahora por la humanidad en esa
dirección, nos es tan difícil determinar la forma de la trayectoria y la
relación de la parte con el todo, como si intentáramos trazar el curso que el
sol lleva con todo su ejército de satélites dentro del gran sistema de
estrellas fijas basándonos en las observaciones celestes que poseemos hasta el
día; aunque en razón de la constitución sistemática de la estructura del
universo y también de lo poco que se tiene observado, podemos concluir con
seguridad suficiente la realidad de semejante órbita.
Kant, Idea para una historia en sentido cosmopolita
A]
Apercepción
A]
Apercatación
[Serie, reiteración, diferencia]
Todo discurso del método [BP2] a
bien de prescribir de sí por primer comienzo la verdad de su metodología ha de
poder hablar en términos claros y precisos aquello que de sí el tiempo se
conmina [hablar, referencia, la voluntad de verdad].
El
trueno sigue siento el trueno;
Aún
estalla roca en corazón.
Unidad trascendental de la apercepción
La Filosofía,
investigación en busca de reglas fijas para descubrir verdades, no para defender
tesis o exponer teorías. Mentira.
Reglas fijas, doctrina,
del principio su aplicación por norma al acontecimiento propicio, el pensar. El
pensar no es.
Hace luego CATEGORÍA.[2]
1] EL RÉGIMEN DE ESCRITURA O la teoría
kantiana de la idealidad del sentido externo y del interno [de todos los
objetos de los sentidos]
La apercepción,
conciencia de sí mismo escribe Kant, es la simple representación del Yo. Si
mediante ella sola todo lo múltiple en el sujeto fuese dado por propia
actividad, postula Kant, la intuición interna sería intelectual. Allí se
distingue de la duda lo racional, principio de razón suficiente.[3]
Esta
tesis, sabido, es el fundamento que persigue Kant a bien de encumbrar a la
lógica[4]
cual fundamento trascendente uno del régimen categorial. Este fundamento es
Nada.
[-Inscripción
del trabajo del filósofo y el filosofar] [El trabajo y la enajenación de
concepto que la simple disposición constituye] [la doctrina, cfr. Descartes][5]
Eso mismo
que se desapercibe de la totalidad de la apercepción, lo mismo entonces que ampara
la catalogación de una posibilidad contingente- que el todo de lo múltiple fuese
dado por propia actividad, es de sí olvido;
a ello en uno, la acometida que describe ser es abandonándonos
Sentido.
Lo múltiple es puro y no es menester demostrarlo. El tránsito de la Ciencia por
la Duda, una obviedad. Esto es todo el rigor del método por certeza; nihilidad.
Hemos de
figurar ahí es donde Kant suscribe una condicional, posibilidad que fracciona
de la totalidad su actancia. Si mediante ella, la apercepción, todo lo múltiple
en el sujeto fuese dado por propia actividad, entonces la intuición
interna sería intelectual. Así despeja el claro de la duda a bien instituir la
duda misma, en su prescripción pura, por todo el trayecto de la Ilustración en
la naturalización por Civilización del sitial donde se instruye:
historiograficidad.
La diferencia
fundamental entre el sujeto y la apercepción es sólo eso, un régimen de
escritura.
Si la
apercepción no soy yo mismo, no es nadie.
La
apercepción no es.
[Olvido es naturalización de la forma:
Paideia. [Aristóteles, Jaegër] [Cfr. Heidegger sobre Jaegër]
2] Filosofía analítica:
El criterio para distinguir de lo
puesto por concepto de la oración, el enunciado, un verso, el sentido por
análisis, es ridículo, absurdo por demás. Que coloca lo racional dispuesto en
medida del objeto al ser asumido del animal racional, hombre, su reificación.
Una mentira nada más.
El subjetivismo es un
antropologicismo. El antropologicismo es el nihilismo.
B] LA POSIBILIDAD DE CONDICIÓN:
[Que todo en el sujeto sea dado por
actividad propia] No es. Nada, nada es en el sujeto por propia actividad. La
actividad no existe, luego la argumentación. Nadie es.
Sé nombre, del nombre viene al plano,
del plano es. Su nombre es. Escucha, atención y escucha, ahí el carácter
acciona:
-
Obediencia al final dictan tan sólo tus
razones.
Por ello mismo gritas “!Fuego, fuego!”
y a morir.
Morir en las playas la hondonada tu
cuerpo
Escuchas torpe caracol sin fango tu
cambio,
Toda la piedad que en azul viene así,
El rayo.
¿Qué cita entonces y cómo de Ovidio
Kant? ¿Cabe y cómo cabe que Hegel planté que no existe verdadera poesía ni
verdadera filosofía entre los romanos?
La catalogación misma de las formas
sintéticas a priori es el régimen de
comprensión en vanidad. Lo naturalizado es lo mismo intelectual. ¿A un poema
cuál es el instante? ¿El instante del ente? [-¡Ah! Entidad, ousía del ente, su
presencia] [argumentación[6]][
No, su sólida presencia no es su presencia. Experiencia viene detrás; quien
calla. No la identidad, cuál, la que en clavel viene así] Demente. Y toda
lógica así se inscribe; detrás quedan las burocracias.
Si claro, evidentemente. Más hace ahí
que el régimen intelectual se levanta sólido y estable en amparo a la
contraposición de un régimen natural nombrado.
Derecho.
[cfr. Calígula de Camus][la
erradicación de la contradicción en los contradictores] [EL GOBIERNO CIENTÍFICO
DEL MUNDO]
El Régimen [7]es
Más de ahí la Naturaleza y la
naturalización de lo mismo intelectual no
es, es retorno, clavamiento azul en tropel. Hueco, palabra en piedad azul;
aislamiento igual tras de sí, lo mismo; Estado, develamiento.
Vano y absurda verdad, de siempre en
eterno retorno, metafísica nomás; tan solo.
Nomás, nada más, tan sólo.
La precisión científica se encarga de
medir y ocultar tras de sí la totalidad de los efectos.
Ahí el rigor del sistema. ¿Cómo ampara
Kant del método en el fenómeno el rigor de la verdad?
La indiferencia,
la duda y finalmente la severa crítica son más bien pruebas de un modo de
pensar riguroso.
Kant, Crítica a la razón pura.
[Del régimen de apercepción
trascendental de la apercepción hemos de dar el salto quizá en todo] [Silencio]
Ser-ahí al instante evento:
La palabra
comunidad es equívoca en la lengua alemana y puede significar tanto communio
como también commercium. Nosotros la usamos aquí en este último
sentido, como comunidad dinámica, sin la cual la misma comunidad local (communio
spatii) no podría nunca ser conocida empíricamente. Es fácil advertir, en nuestras
experiencias, que sólo los influjos continuos en todas las partes del espacio
pueden dirigir nuestro sentido de un objeto a otro;[BP3]
que la luz que juega entre nuestros ojos y los cuerpos del universo efectúa una
comunidad mediata entre nosotros y esos cuerpos y así demuestra la
simultaneidad de estos últimos; que no podemos empíricamente variar de lugar
(percibir esta variación) sin que por todas partes la materia nos haga posible
la percepción de nuestro sitio, y esta materia[BP4] ,
sólo por medio de su influjo recíproco, puede mostrar (aunque solo
mediatamente) su simultaneidad y por ende la coexistencia hasta de los más
lejanos objetos. Sin comunidad, toda percepción (del fenómeno en el espacio)
quedaría separada de las demás y la cadena de las representaciones empíricas,
es decir, la experiencia, empezaría de nuevo en cada nuevo objeto, sin que
pudiera la experiencia anterior estar con ella en la más mínima conexión o en
relación alguna de tiempo. No me propongo con esto refutar el espacio vacío;
pues este puede existir allá donde no alcanzan las percepciones y donde no se
encuentra por tanto conocimiento empírico alguno de la simultaneidad; pero entonces
no es objeto de nuestra experiencia posible.[BP5] [8],
[9],
[10],
[11].
Vacío, de la comunidad el comercio;
ahí, de lo común, su vaciado el mercado; la analítica es el negocio de los filósofos.[BP6]
Así luego el Universo. La Identidad al relato de la sanción: no hay vacío sin
la escritura, más esto se hace condición imposible de análisis. Yace el
fenómeno, interpretas y te elides[12].
Muere Narciso, Crítica a la razón pura:
La unidad del
universo, en el cual deben estar enlazados todos los fenómenos, es
manifiestamente una mera consecuencia del principio, admitido tácitamente, de
la comunidad de todas las substancias simultáneas; pues, si estuvieran éstas
aisladas, no constituirían partes de un todo, y si su enlace (acción recíproca de lo
múltiple) no fuera ya necesario por la simultaneidad, no se podría de ésta,
como relación meramente ideal, venir en conclusión de aquella, como real[BP7] .
En su lugar hemos demostrado que la comunidad es propiamente el fundamento de
la posibilidad de un conocimiento empírico de la coexistencia y que propiamente
la conclusión va de ésta a aquella como condición de ésta.
De la
representación la ocupación de la Tierra por Mundo. Allí luego el Mundo y su
eficacia, los Jerarcas. La contabilidad, su gobierno, se emplaza a los fines.
Allí luego el Mundo por Marcas.
Mónada y sistema:
La monadología de
Leibnitz no tiene otro fundamento que éste: que ese filósofo representó
la distinción de lo interno y de lo externo sólo con relación al entendimiento.
Las substancias [BP9] en
general deben tener algo interno, que esté libre de toda relación
exterior y por tanto también de la composición[BP10] . Lo simple es pues el fundamento de lo
interior de las cosas en sí mismas. Lo interior empero de su estado no puede
consistir en lugar, figura, contacto o movimiento (determinaciones todas que
son relaciones externas) y por ende no podemos atribuir a las substancias
ningún otro estado interior que aquél por el cual nosotros mismos determinamos
interiormente nuestro sentido, a saber: el estado de las representaciones. Así quedaron
establecidas las mónadas que deben constituir la materia fundamental de todo el
universo, y cuya fuerza activa sólo en representaciones consiste, por donde
ellas propiamente sólo en sí mismas son activas.[BP11]
Precisamente por
eso, su principio de la posible comunidad de las substancias unas con
otras debió ser el de una harmonía preestablecida y no podía ser ningún
influjo físico. Pues
como todo es sólo interior, es decir, toda substancia está ocupada con sus
representaciones, el estado de las representaciones de una substancia no podía
estar con el de otra en ningún enlace efectivo, sino que debía haber alguna
tercera causa que influyese en todas las substancias, en conjunto, e hiciese
corresponder los estados unos con otros, y no mediante una ayuda ocasional
introducida en cada caso particular (systema assistentiae), sino por
medio de la unidad de la idea de una cosa valedera para todos, en la cual todos
ellos debieran recibir su existencia y permanencia y por ende también la
correspondencia recíproca de unos con otros, según leyes universales[BP12] .
I Alteraciones: Extraños sucesos que
precedieron la acometida.
En
caravana, andantes a tropel a mitad de la Vida. Tiempo, él sale al paso, tan
solo:
Él
- Verso
es, viene al paso
Todos en tropel lo miran venir
Viene ya, ¿escuchas?
¿Quién tuviera
una Musa de fuego?
Aldeana
1- Vaya poeta.
Él-
¿Quién muriera en azul así?
Aldeano
3 -¡Dios!
Él - ¿Quién
calla en oscuro resguardo el rostro de nuestros guardianes?
Aldeano
2 -No oses más mentir creador, son los
protectores.
Templas
mal el martillo
Él - El
cristal ante la roca,
¿No es la Tierra
misma quien interroga sus nombres?
Labró yo,
Reitero, ¿quién tuviera una musa de fuego?
[Silencio]
¡Henchidas alas!
¡¿Dónde está?!
¿Quién tuviera una musa de fuego?
¡No es deseo, a
ti te interrogo!
[hacia
Aldeana 2]
¿Quién muriera en azul así?
[Blande
su escopeta y le destroza el cráneo a su interlocutora]
En llamas
Eres tú. ¿Dónde estás tú mi musa?
[Interroga
a quien encabeza la caravana,
Mira
al suelo.]
¿Dónde está quien arde a mí?
¿Dónde las brazas de mi voz?
[…]
La Tierra,
Quien tuviera a mi musa en llamas
La tengo,
Mis brazos,
La retengo yo así.
[Abraza
la tierra que de sus plantas arranca]
En la noche yo nomás la abrazo y oso
mentir,
La retengo,
La noche ampara mis resguardos.
No hay más nombre en su voz…
Te interrogo a ti
aldeano,
¿Dónde está mi musa de fuego?
C]
Comprensión de la ilusión kantiana al interior de los aparatos de Derecho
contemporáneos
La cuestión social es solo un
resultado de la decadencia.
Nietzsche, Voluntad
de poder, §.43
[…] con ello no es dado qué es lo que
está presente en el lugar, ni qué es lo que actúa en las cosas mismas.
El lugar acontece a sí a instancia
misma re-efectuada. El Régimen de propiedad no es, es la Propiedad. Se ha
naturalizado el paso: Estado. Estado es resguardo de propiedad.
Régimen de propiedad es sólo régimen a
la naturalidad del modo, la imposición por lógica del modelo.
La propiedad es la enunciación de un
titulazgo.
[oficialidad, documentación]
-
¡Compórtate!
[“¡preserva
el Estado!”]
Al amparo de la Propiedad se levantan
Dictaduras.
Al Régimen de propiedad lo mejor ha de
ser lo mejor o
Nada,
Cualquier otra cosa.
Cualquier
otra cosa
Humano como siempre acontece todo;
La brisa,
totalidad que nos aúna en sentido no
es,
traspasa,
se nos revuelve en piel con todo.
Detorno si quien quizá detrás la selva
lo oculta todo
Si quien detrás la ocultación viene
detrás
el Clavel,
Disfrutando suavemente un helado de
frambuesa;
Humano como siempre acontece todo.
EL GRAN GIRO CULTURAL MEXICANO
El giro de los diez mil años.
No hay por qué amparar y consentir la
miseria del campo, la migración a América, la pérdida de valor en el trabajo.
Nihilismo habla quien dice y habla así las cosas.
De los huertos urbanos la migración
masiva de urbanos. La re-conquista del campo mexicano.
México. Primer productor mundial de
huerta y hortaliza orgánica.
[Muestras internacionales de
gastronomía]
[Las nuevas especialidades mexicanas]
[El sabor de lo mismo]
Eternidad en cada taco.
La apercepción:
¿De qué hablamos cuando hablamos de
unidad trascendental de la apercepción?
Kant
escribe en la Crítica a la razón pura que “es la razón pura una unidad tan
perfecta, que si su principio fuera insuficiente para solo una de las
cuestiones que le son propuestas por su propia naturaleza, habría desde luego
que desecharlo, porque entonces no sería adecuado para resolver, completa
seguridad, ninguna otra.”
¿Cuál es el principio de la razón
pura? ¿Es su principio?
La nulidad de la estructura del texto,
el percatarse del ahí de la reflexión y pensar ahí.
He diseñado toda mi vida esta gran
llave para desenroscar la rosca maestra,
¿Alguien cabe en la hondonada? No
había ningún tornillo.
[La
expresión inconclusa]
Gesto
ocluso
Voluntad
de noticia
Sueles
llamar detrás
Un
corazón si quien cómo,
Noticia
vanidad quizá.
Glaucoma.
La unidad trascendental de la
apercepción.
La vanidad, el azul, lo terrible
Jueces. Formación de jueces e
instrucción judicial.
Instrucción penal. ¿Y la Justicia?
Fariseos detrás la verdad quien empuña
el lodo,
La cuña, la vuelta en oquedad.
Cerdos en las llagas quien doradas de
piedad.
Me inclino y beso el arte y el suelo
de la falda.
Crítica a la razón pura, Prólogo:
[...] los
auxilios para aclarar un punto, si bien son útiles en las partes, distraen
empero a menudo del todo, no dejando al lector alcanzar pronto una
visión de conjunto; con sus claros colores encubren, por decirlo así, y hacen
invisible la articulación o armazón del sistema, que es lo más importante para
poder juzgar de la unidad y solidez del mismo.
Articulación
o armazón del sistema:
Lo más
importante para poder juzgar de la unidad y solidez del mismo.
Arcilla. Los
auxilios. Tesis, proposiciones. Postulados.
Colores.
La Lógica
y sus especies. Jerarquías y reconstrucciones técnicas de operación y
operatividad.
Construcción
de una escala.
Inducción
de la comprensión al resguardo de comprensión de la formación.
La
medición y la distención del modelo.
[-Esto no
pinta…]
La perfecta
unidad de esa especie de conocimientos, obtenida por simples conceptos puros,
sin que nada de experiencia, ni aún siquiera una intuición particular -que
hubiera de conducir a experiencia determinada- pueda tener en ella influencia
alguna para ampliarla y aumentarla, hace que esa incondicionada integridad no
solo sea factible, sino también necesaria. Tecum habita et noris, quam sit tibi
curta supellex (Persio)[BP13] .
Semejante sistema
de la razón pura (especulativa) espero publicar yo mismo con el título de: Metafísica
de la Naturaleza. La cual, aun cuando no tenga ni siquiera la mitad de la
extensión, habrá de poseer sin embargo un contenido incomparablemente más rico
que esta crítica, que ha tenido que exponer primero las fuentes y condiciones
de su posibilidad y ha necesitado limpiar y aplanar un suelo mal preparado.
Aquí espero de mi lector la paciencia e imparcialidad de un juez; allí
en cambio la condescendencia y ayuda de un colaborador; pues por muy
completamente que se expongan en la crítica todos los principios para el
sistema, pertenece empero al pormenor del sistema mismo el que no falte ninguno
de los conceptos deducidos; estos no se pueden traer a priori a
comprobación, sino que han de ser buscados poco a poco. Además como allí (en la
crítica) se agota toda la síntesis de los conceptos, se exigirá aquí (en
el sistema) además que ocurra lo mismo en lo que se refiere al análisis,
todo lo cual es fácil y más bien entretenimiento que trabajo.
Exponer
primero las fuentes y condiciones de su posibilidad y ha necesitado limpiar y
aplanar un suelo mal preparado.
Gestemos
los postulados del sistema de la metafísica de la naturaleza de Immanuel Kant.
El antropologicismo:
LEY ES FENÓMENO CONCORDANTE. LA CONCORDANCIA
La
eurística.
La razón debe
acudir a la naturaleza llevando en una mano sus principios, según los cuales
tan sólo los fenómenos concordantes pueden tener el valor de leyes, y en la
otra el experimento, pensado según aquellos principios; así conseguirá ser
instruida por la naturaleza, mas no en calidad de discípulo que escucha todo lo
que el maestro quiere, sino en la de juez autorizado, que obliga a los testigos
a contestar a las preguntas que les hace. Y así la misma física debe tan
provechosa revolución de su pensamiento, a la ocurrencia de buscar (no
imaginar) en la naturaleza, conformemente a lo que la razón misma ha puesto en ella[BP14] , lo que ha de aprender de ella y de lo
cual por si misma no sabría nada. Solo así ha logrado la física entrar en el
camino seguro de una ciencia, cuando durante tantos siglos no había sido más
que un mero tanteo.
[El camino
seguro de la ciencia. La teología. La secularización. La filosofía
trascendental: Descartes, Spinoza, Newton, Leibniz, Kant] [la razón]
[Trascendentalidad]
INSTITUCIONES
La naturaleza, aquello a lo que se
acude. El acudir es ahí Ciencia.
Ciencia, su razón. El razonar.
El educar.
El discípulo que escucha todo lo que el maestro quiere.
El juez que, en autoridad, obliga a
los testigos a contestar a las preguntas que se les hace.
De la
institución la institucionalidad, la esencia de la verdad.
[“ius-naturalismos”
(co-acción epistemológica)]
Mover el
educar a la forja del ahora. El juicio y la sentencia que instaure el ahora de
la verdad.[BP15]
El momento
que ciñe lo eterno.
[LA
REVOLUCIÓN DEL PENSAMIENTO FÍSICO] [Kant y la historiograficidad]
[La
comprensión histórica de la eternidad]
La
Revolución de su pensamiento.
Las
observaciones contingentes, los hechos sin ningún plan bosquejado de antemano,
no pueden venir a conexión en una ley necesaria, que es sin embargo lo que la
razón busca y necesita.
Buscar, no
imaginar, en la naturaleza, conforme a
lo que la razón misma ha puesto en ella
-la razón,
el método de la crítica: la atención a ella.
Narciso.
Narciso y la crítica a la razón pura.
La
metafísica de la naturaleza es el estanque en oquedad.
El agua
nuestra esperanza.
Metafísica
de la naturaleza: Humanidad de lo humano.
Algo,
noticia.
Devoción
en cuenta regresiva.
La
humanidad que devora toda.
La mentira
lleva al actuar. Esos son grandes.
Las
civilizaciones de la supresión del actuar.
Las
civilizaciones de la voz.
La
civilizaciones de la naturalización del actuar:
Casuística
y lógica sistémica castellana.
Nota 88 de
la edición de Losada:
Hasta aquí
coinciden la 1ª. y la 2ª. edición. La parte que sigue, en el texto, hasta el
final de este § no se halla en la 1ª. edición. En su lugar dice ésta como
sigue: «Mas hay tres fuentes primordiales (capacidades o facultades del alma)
que encierran las condiciones de la posibilidad de toda experiencia y no pueden
a su vez ser derivadas de ninguna otra facultad del espíritu, y son: sentido,
imaginación y apercepción. Sobre ellas se funda 1) la synopsis de lo
múltiple a priori por el sentido; 2) la síntesis de ese múltiple
por la imaginación; por último 3) la unidad de esa síntesis por la apercepción
originaria. Todas estas facultades tienen, además del uso empírico, un uso
transcendental que se refiere sólo a la forma y es posible a priori. De
éste empero por lo que se refiere a los sentidos, hemos hablado más arriba en la primera parte
y las otras dos facultades vamos a esforzarnos por conocerlas ahora, según su
naturaleza».
Aparentemente
la filosofía política es política al plano del concepto. Filosofar es sólo.
La tesis
de mi hermana: lo simple.
El bien de
presentársenos la razón y ser uno, habitad: Mundo.
La
filosofía y la roca.
El
abandono de la lengua.
El
silencio. La oquedad. El retorno a la programación cero.
Donde fue
que modificó Kant la construcción conceptual de la apercepción.
[Ser-ahí-mundo]
[¿Qué ha
movilizado con esa dimensión de reflexión Heidegger?]
D] La
unidad trascendental de la apercepción y el Cógito cartesiano.
El
parágrafo 16 de la Critica a la razón pura, - § 16 –
De la
unidad originariamente sintética de la apercepción
El yo pienso tiene
que poder acompañar a todas mis representaciones; pues, si no, sería
representado en mí algo que no podría ser pensado, [BP16] lo cual significa tanto como decir que la representación
sería, o bien imposible o al menos nada para mí. La representación que pueda
ser dada antes de todo pensar, llámase intuición. Así pues todo múltiple
de la intuición tiene una relación necesaria con el yo pienso, en el
mismo sujeto en donde ese múltiple es hallado. Esa representación empero es un
acto de la espontaneidad, es decir, que no puede ser considerada como
perteneciente a la sensibilidad.
Denomínola apercepción
pura, para distinguirla de la empírica, o también apercepción
originaria, porque es aquella autoconciencia que, produciendo la
representación yo pienso (que tiene que poder acompañar a todas las
demás y que es una y la misma en toda conciencia), no puede ser deducida de
ninguna otra. A su unidad doy el nombre de unidad transcendental de la
autoconciencia, para señalar la posibilidad del conocimiento a priori nacido
de ella. Pues las múltiples representaciones, que son dadas en una cierta
intuición, no serían todas ellas mis representaciones, si no perteneciesen
todas ellas a una autoconciencia, es decir, que, como representaciones mías (aunque
no sea yo consciente de ellas como tales), tienen que conformarse[13]
necesariamente con la condición bajo la cual tan sólo pueden coexistir en una autoconciencia
universal, pues de otro modo no me pertenecerían todas absolutamente. De este
enlace originario pueden sacarse muchas consecuencias.
[…]
esa continua
identidad de la apercepción de un múltiple dado en la intuición, contiene una
síntesis de las representaciones y no es posible sino por medio de la
conciencia de esa síntesis.
La
representación es un acto de espontaneidad; no bueno, apercatémonos entonces
que Kant solo está resolviendo síntesis a la escala de la significatividad y
significación del ideal: la entidad.
Kant no
habla sino del lenguaje.
Más entonces
Kant, ¿así lo comprende? La distinción Mundo / sensibilidad es lo que otorga en
la Crítica, en Kant, en el proyecto ilustrado de la encarnación el sitio de un
ideal: el Hombre. No, a tanto que él interpreta por comprender otra cosa, una
elaboración del yo por sí para consigo, no ahí mediante el lenguaje, un
pensamiento que es pensamiento puro, y no representación mediante el lenguaje.
El campo
de la metafísica es el campo de la representación el lenguaje mediante, ahí los
géneros, la generación, la generalidad.[14]
De la disposición del género por realidad efectiva, el Derecho, a su
información lo positivo, de la ley así todo presupesto en concepto.
Género es
ser de la alegoría.[15]
Tú, yo,
cualquiera, yace olvidado de siempre a la razón de esta cruz:[16]
Aristóteles,
994a:
Por tanto, si no
hay ninguno primero, no la habrá en el total cosa alguna en absoluto. Pero
tampoco es posible un proceso infinito hacia abajo, suponiendo que por arriba
tienen principio, de modo que del fuego proviniera el agua, de esta la tierra,
y así siempre se generara algún otro genero. De dos maneras, en efecto, una
cosa ≪viene de≫9 otra, excluyendo cuando (la expresión ‘venir de ) se
dice en el sentido de ≪esto sucede después de esto≫, por ejemplo, de los juegos ístmicos se viene
a los olímpicos,
sino como el adulto viene del niño al desarrollarse, o bien, como el aire viene
del agua.
La
cuestión hace que de la explicación el primer sujeto en verdad de la atención
al discurso es el propio elocutor del discurso. No se establece una doctrina
sin quedar prendado uno de la misma.[17]
La propia
estructura de la comprensión que describe Kant, y que además Kant arrastra a lo
largo de su obra es ello mismo que apercata de sí la identidad: historiografía.
Así al
género por principio en causa de todo la materia, la naturalización del
discurso a la institución de predicación
por posesión de referencia en lo enunciado de verdad;
Una
conferencia bien vista desde el sitial de la voluntad de poder para con el
evento propicio; ser de sí la asignación que acontece: Apercepción:
Todo lo que es
representado por un sentido es siempre fenómeno y, o no se admite el sentido
interno, o el sujeto, que constituye el objeto de dicho sentido, no puede ser
representado por él, más que como fenómeno y no al modo como juzgaría el sujeto
de sí mismo si su intuición fuese mera actividad propia, es decir, intelectual.
Aquí toda la dificultad estriba tan sólo en cómo un sujeto pueda intuirse a sí
mismo interiormente; mas esta dificultad es común a toda teoría. La
conciencia de sí mismo (apercepción) [BP17] es la simple representación del yo y si
mediante ella sola todo lo múltiple en el sujeto fuese dado por propia
actividad, entonces la intuición interna sería intelectual. En el hombre,
esa conciencia exige una percepción interna de lo múltiple que es dado
anteriormente en el sujeto; y el modo como ese múltiple es dado en el espíritu
sin espontaneidad tiene que llamarse -teniendo en cuenta esa distinción-
sensibilidad. Si la facultad de ser consciente ha de aprehender lo que está en
el espíritu, tiene entonces que afectarle y sólo de ese modo puede producir una
intuición de sí misma, cuya forma empero, anteriormente en el espíritu,
determina en la representación del tiempo el modo cómo lo múltiple está reunido
en el espíritu; y entonces, éste se construye a sí mismo, no como él
representaría, siendo inmediatamente activo por sí mismo, sino según el modo
cómo es afectado por dentro; consiguientemente no como es, sino como se aparece a sí mismo. [BP18]
La unidad
trascendental de la apercepción
La unidad
transcendental de la apercepción es la que une en un concepto del objeto
todo lo múltiple dado en una intuición. Por eso llámase objetiva y debe
distinguirse de la unidad subjetiva de la conciencia, que es una determinación
del sentido interno, por la cual lo múltiple de la intuición es dado
empíricamente para aquel enlace. Que yo pueda empíricamente tener
conciencia de lo múltiple como simultáneo o como sucesivo, es cosa que depende de circunstancias o condiciones empíricas.
Por eso la unidad empírica de la conciencia, por asociación de las
representaciones, se refiere a un fenómeno y es enteramente contingente. En
cambio, la forma pura de la intuición en el tiempo, como mera intuición en
general, que contiene un múltiple dado, se halla bajo la unidad originaria de
la conciencia, exclusivamente por la referencia necesaria de lo múltiple de la
intuición a un yo pienso, y por lo tanto por la síntesis pura del
entendimiento, la cual está a priori a la base de la empírica. Aquella
unidad es la única objetivamente valedera; la unidad empírica de la
apercepción, que nosotros aquí no consideramos y que sólo es derivada in
concreto de la primera, bajo condiciones dadas, no tiene más que una
validez subjetiva. Unos enlazan la representación de cierta palabra con una
cosa, otros con otra cosa; y la unidad de la conciencia, en aquello que es
empírico, no es necesaria y universalmente valedera con respecto a lo que es
dado.
Eso uno
unido en un concepto del objeto todo lo múltiple dado en una intuición es de sí
experiencia:
LAS
ENTIDADES ENUNCIADAS, DESCRITAS, IMPLICADAS SON HECHOS DE LECTURA, HECHOS DE
COMPRENSIÓN Y HECHOS DE INTERPRETACIÓN.
[La
experiencia y el régimen de comprensión, interpretación e identidad:
Monadología: Leibniz en Kant]
[Heidegger
y el ser-ahí]
[El camino del habla]
[Objeto,
experiencia y reificación:
Trabajo,
apropiación del trabajo, salario:
Revolución]
Historia
interna del Nihilismo.
A la
historia del ser el emplazamiento del ser-ahí a su meditación fundamental es la
ontología.
On-to-logía
es ciencia-funda-mental:
Composición
de todas las composiciones: oquedad:
Pollock
sobre la forma.
La
apercepción, sí del sí, es simplemente la reiteración del fondo en el
transfondo de todas las perspectivas.
La unidad
básica de configuración de figura: poesía.
[1]
Incitación a la plástica.
[2]
Ahí la economía.
[3]
A ello se normaliza toda institución científica, allí el respecto de lo Social,
lo múltiple dado en el sujeto por propia actividad. Así luego el Derecho en
seguridad y libertad. El primado básico del iusnaturalismo.
¿Qué ha
naturalizado esto de la condena del mundo? SU CULPABLE CULPABILIDAD –la
teología del pecado [cfr. Job ante la Ilustración]
[4]
¿Qué es la lógica? La idealidad de sus postulados. La idealidad de los
postulados de algo es la ciencia del algo mismo. La constitución de la
experiencia de la ciencia de la idea precede en creces a la idea misma, aún de
sí a la experiencia a sí de ella; Narciso es Ocaso. [Cfr. José Lezama Lima.
¿Qué es el ser que subsiste a Narciso a su muerte sino él mismo? ¿Quién es
Natural? ]
Muerte de
Narciso, 16° estrofa:
Narciso, Narciso. Las astas del ciervo asesinado
son peces, son llamas, son flautas, son dedos mordisqueados.
Narciso, Narciso. Los cabellos guiando florentinos reptan
perfiles,
labios sus rutas, llamas tristes las olas mordiendo sus caderas.
Pez del frío verde el aire en el espejo sin estrías
racimo de palomas
Final, estrofa 18°:
Así el espejo averiguó callado,
así Narciso en pleamar fugó sin alas.
En el
inicio el poema comienza:
Dánae teje el
tiempo dorado por el Nilo,
envolviendo los labios que pasaban
entre labios y vuelos desligados.
Historiograficidad,
de allí toda Naturaleza; al estar del apercetarse de lo apercatado, la
apercepción.
[ Ahí nace
Adrián Dárguelos; un personaje; Adrián Rodríguez es Adrián Rodríguez] [La
lógica azul y gris]
[La
fenomenología del espíritu en Babasónica. La lectura a la historia de la
filosofía en la letra de las canciones de Babasónicos]
[5]
Descartes, Discurso del método, p. 39
Aprovecho esta ocasión para rogar a nuestros descendientes que no
crean nunca que proceden de mí las cosas que les digan otros, si no es que yo
mismo las haya divulgado; y no me asombro en modo alguno de esas extravagancias
que se atribuyen a los antiguos filósofos, cuyos escritos no poseemos, ni juzgo
por ellas que hayan sido sus pensamientos tan desatinados, puesto que aquellos
hombres fueron los mejores ingenios de su tiempo; sólo pienso que sus opiniones
han sido mal referidas. Asimismo vemos que casi nunca ha ocurrido que uno de
los que siguieron las doctrinas de esos grandes ingenios haya superado al
maestro; y tengo por seguro que los que con mayor ahínco siguen hoy a
Aristóteles, se estimarían dichosos de poseer tanto conocimiento de la
naturaleza como tuvo él, aunque hubieran de someterse a la condición de no
adquirir nunca más amplio saber. Son como la yedra, que no puede subir más alto
que los árboles en que se enreda y muchas veces desciende, después de haber
llegado hasta la copa; pues me parece que también los que siguen una doctrina
ajena descienden, es decir, se tornan en cierto modo menos sabios que si se
abstuvieran de estudiar; los tales, no contentos con saber todo lo que su autor
explica inteligiblemente, quieren además encontrar en él la solución de varias
dificultades, de las cuales no habla y en las cuales acaso no pensó nunca. Sin
embargo, es comodísima esa manera de filosofar, para quienes poseen ingenios
muy medianos, pues la oscuridad de las distinciones y principios de que usan,
les permite hablar de todo con tanta audacia como si lo supieran, y mantener
todo cuanto dicen contra los más hábiles y los más sutiles, sin que haya medio
de convencerles; en lo cual parécenme semejar a un ciego que, para pelear sin
desventaja contra uno que ve, le hubiera llevado a alguna profunda y oscurísima
cueva; y puedo decir que esos tales tienen interés en que yo no publique los
principios de mi filosofía, pues siendo, como son, muy sencillos y evidentes,
publicarlos sería como abrir ventanas y dar luz a esa cueva adonde han ido a
pelear.
[6]
Todo argumento, de la historiograficidad, presupone el personajeo.
Caracterología de tropo por apropiación retórica del logos por la dialéctica de
las formas puras. [cfr. Protágoras,
el Sofista]
[7]
Ser es Reconocer. Reconocer es asunción de majestad. La majestad es autoridad
sólida de la piedra y el cincel. Buril y martillo, humana como siempre la
justicia en verdad tarda en conocérsenos. Viene detrás así; amarillo.
[8]
La ingenuidad fenoménica. Kant, Crítica a la Razón pura, §.1 La estética
trascendental:
La capacidad
(receptividad) de recibir representaciones por el modo como somos afectados por
objetos, llámase sensibilidad. Así, pues, por medio de la sensibilidad nos son
dados objetos y ella sola nos proporciona intuiciones; por medio del
entendimiento empero son ellos pensados y en él se originan conceptos. Pero
todo pensar tiene que referirse ya directa, ya indirectamente mediante ciertas
características en último término a intuiciones, por lo tanto, en nosotros a la
sensibilidad, porque ningún objeto puede sernos dado de otra manera. El efecto
de un objeto sobre la capacidad de representación, en cuanto somos afectados
por él, es sensación. Aquella intuición que se refiere al objeto por
medio de la sensación, llámase empírica. El objeto indeterminado de una
intuición empírica, llámase fenómeno.
En el fenómeno,
llamo materia a lo que corresponde a la sensación; pero lo que hace que
lo múltiple del fenómeno pueda ser ordenado34 en ciertas relaciones, llámolo la
forma del fenómeno. Como aquello en donde las sensaciones pueden
ordenarse y ponerse en una cierta forma, no puede, a su vez, ser ello mismo
sensación, resulta que si bien la materia de todos los fenómenos no nos puede
ser dada más que a posteriori, la forma de los mismos, en cambio, tiene
que estar toda ella ya a priori en el espíritu y, por tanto, tiene que
poder ser considerada aparte de toda sensación. Llamo puras (en sentido
transcendental) todas las representaciones en las que no se encuentre nada que
pertenezca a la sensación. Según esto, la pura forma de las intuiciones
sensibles en general, en donde todo lo múltiple de los fenómenos es intuido en
ciertas relaciones, se hallará a priori en el espíritu*
*Espíritu
es espíritu humano, humanidad, objeto del cosmopolitismo. El cosmopolitismo es un bolchevismo.
[9]
Fenomenología es consideración epistemológica de la apariencia para el método.
De sí, todo lo absoluto es relativo. Luego el análisis es historia de la
atribución de diferencia en categoría: la historiografía del interpretarse. El
fenómeno es la representación representada de la certeza sensible. Hegel, Fenomenología del espíritu, Fuerza y
entendimiento:
Esta esencia verdadera de las cosas se ha
determinado ahora de tal modo que no es inmediatamente para la conciencia, sino
que ésta mantiene un comportamiento mediato hacia lo interior y, como
entendimiento, contempla, a través de este término medio del juego de las
fuerzas, el fondo verdadero e las cosas. El término medio que enlaza los
dos extremos, el entendimiento y lo interior, es el ser desarrollado de
la fuerza, que de ahora en adelante es para el entendimiento mismo un desaparecer.
Por eso se le da el nombre de manifestación [Erscheinung], ya que
llamamos apariencia [Schein] al ser que es en él mismo, de modo
inmediato, un no-ser. Pero no es sola-mente una apariencia sino un fenómeno,
la totalidad de lo que aparece. Esta totalidad, como totalidad o
lo universal, es lo que constituye lo interior, el juego de fuerzas, como
reflexión de ese juego en sí mismo. En él, las esencias de la percepción
son puestas para la conciencia
La fenomenología
es el análisis de la dialéctica de la certeza sensible, el puesto y lo supuesto
de la conciencia al ponerse de la percepción. El análisis de la dialéctica de
la certeza sensible,[Ciencia de la conciencia de la experiencia], de allí su
emplazamiento para con la Ciencia de la Lógica La conciencia de la experiencia
es el análisis, el análisis a su voluntad de poder coloca lo analítico por la
certeza sensible misma y de ahí la nueva síntesis que nombra lógica
trascendental. Que ya la encuentra así nombrada.
[EL
DISPOSITIVO RIDÍCULO QUE HABLA Y EXPLICA LA FILOSOFÍA CUANDO EL ESTO ES COMO
ESTO Y DE AHÍ ENTONCES LA HERMENÉUTICA DEL SUCESO EN EL DISCURSO EXPOSITIVO
COMPRENSIVO DE LA LÓGICA INTERNA DEL PROCESO] Todo es falso. Claro es
representación. Hegel, Fenomenología del
espíritu:
Es claro que la dialéctica de la certeza
sensible no es sino la simple historia de su movimiento o de su experiencia y,
a su vez, la certeza sensible misma no es sino esta historia. La conciencia
natural llega, por ello, siempre, por sí misma, a este resultado, lo que en
ella es lo verdadero y hace la experiencia de ello; pero en seguida vuelve a
olvidarlo y reinicia el movimiento desde el principio. Es, pues, sorprendente
que, frente a esta experiencia, se presente como experiencia universal y
también como afirmación filosófica y hasta como resultado del escepticismo, el
que la realidad o el ser de las cosas exteriores, en cuanto estos o cosas
sensibles, tiene verdad absoluta para la conciencia. Semejante afirmación no
sabe lo que dice, ni sabe que dice cabalmente lo contrario de lo que se propone
decir. La verdad del esto sensible para la conciencia debe ser
experiencia universal, pero resulta que la experiencia universal es más bien lo
contrario; toda conciencia supera a su vez una tal verdad, como por ejemplo el
aquí es un árbol o el ahora es mediodía, y expresa lo contrario de
ello: el aquí no es un árbol, sino una casa; y lo que en esta
afirmación, que supera la primera, es a su vez una afirmación semejante de un
esto sensible lo supera también inmediatamente; y así, en toda certeza sensible
sólo se experimenta en verdad lo que hemos visto, es decir, el esto precisamente
como un universal, lo contrario de lo que aquella afirmación asegura que
es la experiencia universal*. Y, al remitimos a la experiencia universal, se
nos permitirá que nos anticipemos a la consideración de lo práctico.** A este
respecto, cabe decir a quienes afirman aquella verdad y certeza de la realidad
[Realität] de los objetos sensibles que debieran volver a la escuela más
elemental de la sabiduría, es decir, a los antiguos misterios eleusinos de
Ceres y Baco, para que empezaran por aprender el misterio del pan y el vino,
pues el iniciado en estos misterios no sólo se elevaba a la duda acerca del ser
de las cosas sensibles, sino a la desesperación de él, ya que, por una parte,
consumaba en ellas su aniquilación, mientras que, por otra parte, las veía
aniquilarse a ellas mismas. Tampoco los animales se hallan excluidos de esta
sabiduría, sino que, por el contrario, se muestran muy profundamente iniciados
en ella, pues no se detienen ante las cosas sensibles como si fuesen cosas en
sí****, sino que, desesperando de esta realidad [Realität] y en la plena
certeza de su nulidad, se apoderan de ellas sin más y las devoran; y toda la
naturaleza celebra, como ellos, estos misterios revelados, que enseñan cuál es
la verdad de las cosas sensibles.
Sin embargo,
también quienes formulan semejante afirmación dicen, con arreglo a las
anteriores observaciones, directamente lo contrario de lo que suponen, y este
fenómeno es tal vez el que mejor se presta a llevarnos a
reflexionar
acerca de la naturaleza de la certeza sensible. Hablan de la existencia de los
objetos externos, que cabe determinar todavía con mayor precisión como
cosas reales, absolutamente singulares, totalmente personales e
individuales, cada una de las cuales no tiene ya su igual absoluto, y dicen
que esa existencia posee certeza y verdad absolutas.**** Suponen este trozo
de papel en que escribo, o mejor dicho he escrito, esto; pero no dicen
lo que suponen. Si realmente quisieran decir este trozo de papel que
suponen y esto es lo que quieren decir esto es imposible, ya que el esto
sensible supuesto es inasequible al lenguaje, que pertenece a la
conciencia, a lo universal en sí.****
Por tanto, bajo el intento real de decirlo se desintegraría; quienes
comenzaran a describirlo no podrían acabar su descripción, sino que deberían
dejarlo a cargo de otros, los cuales tendrían que reconocer ellos mismos, a la
postre, que hablaban de una cosa que no es.****** Suponen, por tanto,
indudablemente este trozo de papel, que aquí es completamente otro que
el de arriba; pero hablan de "cosas reales, de objetos externos o
sensibles, de esencias absolutamente individuales", etc.; es
decir, sólo dicen de ellos lo universal; por tanto, lo que se llama lo
inexpresable no es sino lo no verdadero, lo no racional, lo simplemente
supuesto. Si no decimos de algo sino que es una cosa real, un objeto
externo, no decimos solamente lo más universal de todo, y de este modo
enunciamos más bien en su igualdad con todo que su diferenciabilidad. Si
digo una cosa singular, la digo más bien como totalmente universal, pues
todo es una cosa singular; lo mismo que esta cosa es todo lo que se quiera.
Y si, más exactamente, se indica este trozo de papel, tendremos que todo
papel es un este trozo de papel, y yo he dicho siempre solamente lo
universal. Pero, si quiero echar mano del discurso, que tiene la naturaleza
divina de invertir inmediatamente la suposición para convertirla en algo
distinto y no dejar, así, que se exprese en modo alguno en palabras, puedo
indicar este trozo de papel, y hago entonces la experiencia de lo que es
de hecho la verdad de la certeza sensible: lo indico como un aquí que es
un aquí de otros aquí o en él mismo un simple conjunto de muchos aquí;
es decir, que es un universal; lo tomo tal y como es en verdad y. en
vez de saber algo inmediato, lo percibo.******
*Luego así
la Hermenéutica.
**lo
hermenéutico ya considera en análisis lo práctico olvidado del simple análisis
del fenómeno en la ingenuidad de la razón pura de pensar a priori experiencias
universales- las categorías. De ello la simple “evolución” del tiempo a su
concepción.
De ello el
materialismo en el curso fatal de su concrescencia significativa para con el
espaciamiento del tiempo a su comprenderse: el espíritu del tiempo.
***Toda la
tropología evoluciona de la analogía del ser en el como del fenómeno en un como
sí la cosa en sí. En si a si como para sí, luego el Yo, hombre, es toda la
miseria de la torpeza. Yo no entiendo, dice su miseria. Si tan sólo supiera el
no saber que no sabe nada. Así la negatividad que todo lo envuelve por
instrumento ahora. [Aquí se quiebra todo Hayden White]
****Este es
el dispositivo de Ciencia empírica, luego así la filosofía analítica en la
presunción de sus verdades, la naturalidad de la representación al en sí de la
voluntad. Les gusta hablar de intenciones. El espíritu es la levadura de la
mente. Así plano es el realismo, como día de Pascua y el ángel asolando a su
espectro por la puerta de cada Castillo. Luego hay marcas y gente que pregunte.
Tú te sientas y ante el terror narras la historia. Dios existe.
*****El crash de la representación es el en sí
del objeto analítico puesto por síntesis de proceso en el para sí del concepto,
imaginación: luego el ente explicitado por la hermenéutica del siglo XX como
confección en recepción del referente técnico de un discurso. El discurso en sí
de la filosofía científica ante las lógicas de academia. [Luego prácticas y
desde la sociología de miras reimponer a todo el sentido de lo propio, acción,
poder por reefectuación de verdad] [“estertor y decadencia”]
******Ser y tiempo.
*******Un
verso y su versarse, lo versado. Aún así habrá quien hable de poetas y
dramaturgos, tal como se puede hablar diferenciado de Shakesperare;
aristotelismo sin más, increados.
[10]
Alfred North Whitehead, Realidad y
proceso, p. 19:
La
elucidación de la experiencia inmediata es la única justificación de cualquier
pensamiento, y el punto de partida del pensamiento * es la observación
analítica de los componentes de esta experiencia inmediata**, en función de los
diversos detalles que abarcan su nitidez. Solemos observar mediante el método
de la diferencia. A veces vemos un elefante, a veces no. El resultado es que
cuando un elefante está presente, lo notamos. La facilidad de la observación
depende del hecho de que el objeto observado es importante cuanto está
presente, y a veces está ausente.
Los
principios metafísicos primeros nunca pueden dejar de ejemplificarse. Nunca
podremos captar el mundo real*** si nos permitimos liberarnos de ese imperio.
De esta suerte, para el descubrimiento de la metafísica, fracasa el método de
sujetar el pensamiento a la estricta sistematización de la discriminación
detallada que se lograra ya por anterior observación. El fracaso del método del
empirismo rígido no se limita a la metafísica. Se produce siempre que buscamos
generalidades más amplias. En la ciencia natural, ese método rígido es el
método inductivo de Bacon, método que, de haberse seguido consecuentemente,
habría dejado a la ciencia donde la encontró. Lo que Bacon no mencionó fue el
juego de una imaginación libre fiscalizada por los requisitos de la coherencia
y la lógica. El verdadero método del descubrimiento es como el vuelo de un
aeroplano. Despega del suelo de la observación particular; hace un vuelo por la
delgada capa de aire de la generalización imaginativa, y aterriza de nuevo para
reanudar la observación agudizada por la interpretación racional.
*[el sí
mismo de Whitehead a confección del ente en totalidad]
**cítese a
Kant sin nombrar a Kant aún cuando se habla explícitamente de ir de vuelta a la
filosofía que comienza en Descartes y culmina en Hume. Hume no existe, es sólo
su apariencia fenoménica desde el acontecimiento propicio de Kant
***Léase
tan sólo Derecho. El fenómeno es mera imaginación.
[11]
Heidegger, Ser y tiempo, §7:
La expresión griega ϕαινόμενον, a la que
remonta el término “fenómeno”, deriva del verbo ϕαίνεσθαι, que significa
mostrarse; ϕαινόμενον quiere decir, por consiguiente: lo que se muestra, lo
automostrante, lo patente; ϕαίνεσθαι es, por su parte, la forma media de ϕαινω:
sacar a la luz del día, poner en la claridad. Φαινω pertenece a la raíz ϕα‐, lo
mismo que la luz, la claridad, es decir, aquello en que algo puede hacerse
patente, visible en sí mismo. Como significación de la expresión ”fenómeno” debe
retenerse, pues, la siguiente: lo‐que‐se‐muestra‐en‐sí‐mismo, lo
patente. Los ϕαινόμενα, “fenómenos”, son entonces la totalidad de lo que yace a
la luz del día o que puede ser sacado a luz, lo que alguna vez los griegos
identificaron, pura y simplemente, con τὰ ὄντα (los entes). Ahora bien, el ente
puede mostrarse desde sí mismo de diversas maneras, cada vez según la forma de
acceso a él. Se da incluso la posibilidad de que el ente se muestre como lo que
él no es en sí mismo. En este mostrarse, el ente “parece…”. Semejante
mostrarse lo llamamos parecer.
[…]
En nuestra terminología asignamos el término
“fenómeno” a la significación positiva y originaria de ϕαινόμενον, y
distinguimos fenómeno de apariencia, como la modificación privativa de
fenómeno. Pero lo que ambos términos expresan no tiene por lo pronto
absolutamente nada que ver con lo que en alemán se llama “Erscheinung”, e.d.
“fenómeno” en el sentido de “manifestación” o también “bloβe Erscheinung”, “mera
manifestación”.
Así la
disposición por dato positivo del fenómeno a tanto que fenómeno en la
hermenéutica de Heidegger confiere en señal la referencia del apercatarse de lo
apercatado de la apercepción.
De la negatividad
la medida y el dado. Así lo positivo. A lo positivo en su estarse, la
privación, luego la posesión, el ente por Bien y luego la Propiedad. Así a la
propiedad se nombran valores. Todo esto constriñe toda moral en su
historiográfica de prescripciones para con lo racional de lo real en realidad
de la razón.
[12]
Las palomitas de Whitehead. Luego ahora la mantequilla de Quine. Alguien
fabrica tanques, otro automotores. Nosotros vendemos tamales.
[13]
Kant en nota: “Si las representaciones mismas son idénticas y puede por lo
tanto ser pensada analíticamente la una mediante la otra, es cosa que no
consideramos aquí. La conciencia de la una tiene que distinguirse siempre de la
conciencia de la otra, por cuanto se trata de lo múltiple, y lo que aquí
importa es la síntesis de esa (posible) conciencia.”
¿Es
acaso esa cosa no considerada por Kant la consideración de Hayden White a la
construcción de la lógica de la investigación de Metahistoria?
[Construcción
y no concepción] La concepción es una metáfora, las palabras se construyen.
[14]
Género es interpretación categórico de
lo sensible y lo no sensible por identidad lógica de comparación, es la
instrumentación del alagoría del ser por ser de la alegoría.
Género es
ser de la alegoría.
Cuando
decimos que la tragedia es el género del teatro –o composición poética de
dramaturgia- no estamos diciendo nada efectivo, aún cuando toda nuestra dicción
sea eminentemente clara y racional.
[15]
El ser de la alegoría es un emplazamiento narrativo por estructura, así ya
siempre el estado de facto del evento –su autoconciencia- es el acontecimiento
propicio.
[16]
Entendamos que así Aristóteles sólo habla de la representación, esta
representación de la reprepresentación
su representarse y no algo así como representarse de la naturaleza. Phyisis, la
natura latina, la naturaleza de la ciencia moderna, es el representarse del
representarse en representación.
Todo a
priori es una institución lógica al detalle del trato, la apercepción.
[17]
¿A qué deviene el pensador de sí al género de su doctrina? Él mismo en la
asignación narrativa de sí en sujeto –y sólo de sujeto en persona por posesión
de bien en propiedad: Derecho.
Así la
autoría y la autoridad de sí.
[BP1][Estar]
es el discurso del pensar. ¿Y dónde así el pensar del discurso? [ethos,
interioridad] [¿Cómo los analíticos renuncian a la espacialidad metafísica y
abonan sus categorizaciones a la mente?]
La diferencia ontológica, el ello que distingue en gris
la tormenta. Cfr. No los cuidados del ello.
[El estatuto fundamental onteógeno de la oquedad]
NO LOS CUIDADOS DEL
Ello. (2012-11-27
17:05)
“Resonancia que llama cada
cosa en su historia, es el puente que entreteje una y otra orilla del cause que
lento lo determina y deposita lejano al amparo del mismo silencio que Dios
persigue.
Todo lo envuelves de resonancias.”
Estar es el discurso del pensar,
El pensar es del discurso la resonancia que llama
cosa en su historia.
Llamar cada cosa en su historia es llamarla al claro
por absoluto de su totalidad.
El llamar cada cosa en su historia es el
entretejerse del puente, una y otra orilla ahí, en el silencio mismo que Dios
persigue. El último dios que todo lo envuelve de resonancias.
De allí entonces el abandono al palacio de la
Verdad.
[el palacio de la verdad como la tierra de los
hombres libres]
[BP2]EL
DISCURSO DEL MÉTODO es del discurso del pensar su duda, la institución.
¿cómo así la institución de la duda en la institución
del discurso del pensar? Su inscripción, la puesta por marca del principio.
Duda, crítica y apercepción sujetada por principio: la
presencia, su emergencia. Toda física es una retórica del presentarse.
Del presentarse la advertencia. Ahí el espacio.
Si el principio es ello mismo que no tienen principio y
que explicita a la causa en tanto causa a tanto de aquello por lo cual cada
cosa es ella misma mayoririamente –en la experiencia- lo que es, ¿qué hizo
Descartes con el principio para con la modernidad?
Acabarlo, Descartes acaba los principios [n.5]
[BP4]Así
de la LUZ, la materia se cosifica; luego el objeto reflexivo queda entificado.
De la reflexión el ente por verdad develado. Así del Método, todo es falso;
opera.
[BP5]Chingón
hace del ser que no es objeto posible de nuestra experiencia –cuando la
experiencia viene en legitimidad a legislarlo todo- y es por referencia última,
toda la confección del sistema. Lógica se habita; es estética.
Y así se hace imposible para la filosofía trascendental
reflexionar la escritura, verdades se habita, luego la hermenéutica la
develaría todo falso. No hay análisis posible de la hermenéutica.
En representación luego el útil por efecto. Así las
cláusulas al pragmatismo en la elisión por necesidad del fenómeno en la
comprensión de la interpretación de Mundo.
El fenómeno en Kant [[vid. n.6]
El fenómeno en Hegel [vid. n.7]
El fenómeno en Whitehead [vid. n.8]
El fenómeno en Heidegger [vid. n.9]
LA HISTORIOGRAFÍA EN COMPRENSIÓN DE HISTORIOGRAFICIDAD.
Lenguaje, expresión, realidad efectiva y la oclusión
lógico significante a la comprensión interpretadora del lenguaje: poiesis,
Así luego el rastro de Platón.
[destrucción hermenéutica a la fenomenología de la idea]
LA
NATURALIDAD DEL MUNDO –lo universal- EN LA DIALÉCTICA:
Si
alguien tiene aún dudas, después de todas estas explicaciones, y vacila en renunciar
al uso meramente transcendental de las categorías, haga un ensayo de ellas en
alguna afirmación sintética. Pues una afirmación analítica no conduce al
entendimiento más allá y, estando éste
ocupado sólo con lo que ya en el concepto está pensado, deja sin decidir si el
concepto en sí mismo tiene referencia a objetos o sólo significa la unidad del
pensamiento en general (que hace por completo abstracción del modo como un
objeto pueda ser dado); le basta saber lo que hay en el concepto; no le importa
a qué se refiera el concepto mismo. Ensaye, pues, con algún principio sintético
y supuesto transcendental, como v. g.: «Todo lo que existe, existe como
substancia o como determinación pertinente a la misma» o «Todo lo contingente
existe como efecto de otra cosa, a saber: su causa», etcétera, etc.
[BP7]El
mundo concebido por valores.
[BP8]Sólo
falta un Buda que emerja y llame: “-No existe la libertad, libérate.”
[BP9]La
sustancia es el valor; luego Quine y la metafísica de sistemas:
Ser es el valor de una variable.
De la variable su inscripción, terror naturaleza, y
todo es el vacío del mundo libre al horror de su espectáculo contemporáneo.
[BP10]Esto
algo interno, es el servicio.
Así las cosas sirven, al depositarles de nosotros el
crédito, el hueco de un valor.
“- Ese globo ya no sirve.
-Los globos no sirven, sólo se inflan.”
De lo sintético analizable, la reivindicación de
realidad. Así luego su adecuación para con la Palabra de Sistema. Lo simple es
el servir.
[cfr. El mundo es simple, claro y azul] El fundamento
luego se deposita a bien servirse, así la temporalidad es una posesión. Luego
las cosas a su abandono. Propiedades, y nada es para nosotros.
[BP11]Y
a esta interpretación del Mundo se le llama “sionismo” ¿Dónde posa el
“sionismo” ahí en el libro de Job?
Alfredo Jalife Rahme, sus contendientes… ¿quieren a
México en México o quieren una doctrina?
[BP12]Sólo
así Dios vuelve persona. Dios ha muerto.
[BP14]Ya
no es la imaginación, sino lo que la razón
ha puesto en ella, la naturaleza en develamiento de verdad. El
develamiento de la verdad en razón, la misma imagen.
Así siempre ella transpuesta por fenómeno de todo pensamiento
e idea.
[BP15]Cita.
[BP16]Eso
representado en mi, algo que no podría ser pensado es, pasa de mi y me
subsiste: la representatividad de ser, yo mismo, es sólida a su amparo.
La representación es nada para mí.
Las constricciones morales que al caso las tesis y
postulados de Kant contraen:
La constitución y la legalidad que la apercepción
constituye, en pasado y oquedad al despliegue del cogito cartesiano.
Descartes.
Así cabe comprender que la intuición tiene el ser del
mundo, es del mundo quien es, de sí lo intuido a sí.
El sí del sí.
La autoconciencia de la intuición y la desatención
conceptual a la acometida.
La requisición civilizatoria.
La asunción cristina de la concepción
Y la conceptualidad.
Cristianismo, reforma, secularización y régimen de lógica
conceptual:
Abducción de la historiograficidad desplegada en sus
baremos por Foucault en atención a la institución conceptual de Occidente: Las
palabras y las cosas, la arqueología del saber.
Para la retórica lo imposible es la realidad plena del deseo:
pasado.
Toda proyección es constitución de confecciones:
preservación de paso reservado –agencia de Derecho- usufructo del Estado.
El usufructo del Estado, ¿pertenece?
[BP17]Así
la conciencia de sí, la apercepción, el fenómeno puro, es entonces en eterno
retorno de lo mismo significación asignante de designio por signo de identidad,
consignación de decurso en transurso de objeción, una perpetuidad del evento en
sí como sí para sí a tanto de Lucha.
[BP18]De
ello todo el ser como fenomenología.
Luego el espíritu.
Espíritu es pensarse de sí como sí en atención al
referente, obediencia.